Regina era una cruce de mastín de 5 años de edad, encantadora, asustadiza, que poco a poco conseguimos que se dejara tocar e incluso conseguimos que nos diese besitos.
Ella no se merecía lo que la hicieron, unos personajes dementes y crueles. No les bastó con llevarse a tres perros de las instalaciones (dos han aparecido, uno por los alrededores y otra tirada por la valla ayer domingo), abrir varias jaulas, destrozar varias vallas para acceder dentro…. Los salvajes además cogieron a nuestra Regina, ataron
sus patas con alambre, abusaron sexualmente de ella, la introdujeron una fruta en su orificio anal y la golpearon salvajemente en la cabeza hasta que el pobre animal no tuvo fuerzas para resistir y falleció en un charco de sangre. Tiene la cabeza irreconocible a golpes, el morro partido, las patas cortadas por el alambre y sus intentos de escapar, los genitales y el ano destrozados. Lo que le han hecho es absolutamente abominable.